El fracaso

Queridos lectores, amigos, compañeros, familia...
Como muchos ya saben, no logré ingresar al IUNA ( Inst. Universitario Nacional de Arte) ni a la EMAD (Escuela Metropolitana de Arte Dramático). Sé que esto nada tiene que ver con mi capacidad para la materia, son meras pruebas en las que uno nunca sabe bien qué es lo correcto e incorrecto. El problema son los cupos (200 aprox en la primera y 25 en la segunda). Pero a pesar de todo, me es inevitable sentir la frustración, sentir que fracasé en aquello que venía esperando durante tanto tiempo.

No pensé que me iba a molestar tanto, pero la verdad es que me angustia tener que posponer mi carrera un año más... Yo quiero simplemente aprender de este maravilloso camino, quiero crecer como persona que se dedica a esto, quiero saber, practicar, evolucionar, mutar y expandir mis límites más y más. Y tener que esperar un año más es muy frustrante.

Me siento una inútil por momentos, quisiera volver atrás y descubrir dónde me equivoqué. Rememoro ese instante en el cual hice mi monólogo y me pregunto "qué hubiera pasado si..." Pero es en vano. Además ni siquiera estoy segura de qué fue lo que "hice mal". Pero aún así, continúo martirizándome con posibilidades infinitas e imposibles, porque ese tiempo no va a volver.

Y todos los que creían en mí... No sé, por un lado también es vergonzoso (Sí, sé que no debería ser así...). Siento que le fallé a un montón de personas que me desearon toda la suerte del mundo y lo eché a perder. 

Y ahora me encuentro acá, lamentándome, preguntándome por qué, como si eso fuera a cambiar algo. Todo esto sabe a pérdida y no lo es, no sé si eso sea lo peor; que en realidad no fallé, que ahora me dijeron que no y no tengo más que esperar un año para probablemente comenzar la carrera.

Sé que esto no es el fin del mundo, pero me enoja... Y todo lo que había planeado resulta no ser. Y me siento perdida, por momentos aún incrédula. Pero lo importante es no perder la cabeza por algo que no es tan grave. Con el tiempo sabré porque las cosas sucedieron así, hoy sólo tengo que aceptarlo y seguir para adelante y que el mal trago sólo sea un recuerdo.

Ya se me ha derrumbado el mundo una vez y sé que lo mejor está por venir.

¡ME MOLESTA ESTO!  Pero... son cosas que pasan.